La ortopedia es una rama de la medicina que se dedica a la corrección y tratamiento de las deformidades o problemas en huesos, articulaciones, ligamentos, tendones y músculos. Su principal objetivo es mejorar la movilidad y calidad de vida de las personas, especialmente aquellas que han sufrido lesiones, operaciones o que padecen enfermedades crónicas. Existen distintos tipos de ortopedia que varían según el tipo de soporte, el área del cuerpo que necesita tratamiento y el propósito del aparato ortopédico. En este artículo, exploramos los principales tipos de ortopedia y sus aplicaciones.
1. Ortopedia Funcional
La ortopedia funcional se enfoca en ayudar a las personas a realizar movimientos y actividades diarias con menos dolor y mayor facilidad. Incluye dispositivos como órtesis y férulas, que estabilizan y corrigen la posición de articulaciones y miembros. Entre los elementos comunes en la ortopedia funcional están:
- Órtesis de muñeca y mano: Para aliviar el dolor en personas con síndrome del túnel carpiano, artritis, entre otras afecciones.
- Férulas de tobillo y pie: Útiles en casos de esguinces, fracturas o para ayudar a pacientes con debilidad en los pies.
- Órtesis de rodilla: Frecuentemente utilizadas en personas con lesiones de ligamentos o tendones, o problemas de artritis.
2. Ortopedia Pediátrica
Este tipo de ortopedia se centra en el tratamiento de problemas de desarrollo en niños y adolescentes. El objetivo es corregir deformidades a edades tempranas, permitiendo un desarrollo más saludable y previniendo problemas en la adultez. Algunos ejemplos de dispositivos en ortopedia pediátrica son:
- Corsés para escoliosis: Utilizados para corregir la curvatura de la columna en niños en crecimiento.
- Plantillas ortopédicas: Ayudan a corregir problemas de pisada y apoyar el desarrollo de los arcos del pie.
- Prótesis pediátricas: Diseñadas para niños con pérdida de extremidades, promoviendo su movilidad e independencia.
3. Ortopedia Deportiva
La ortopedia deportiva ofrece soluciones para aquellos que practican deportes y necesitan dispositivos que ayuden a prevenir lesiones o a recuperarse de ellas. Este tipo de ortopedia es fundamental para quienes desean mantener su rendimiento físico sin comprometer su salud. Entre los dispositivos más comunes están:
- Rodilleras y coderas de compresión: Protegen las articulaciones y ofrecen estabilidad durante el ejercicio.
- Soportes para el tobillo: Muy comunes entre jugadores de fútbol y baloncesto para prevenir esguinces.
- Cinturones lumbares: Utilizados para soportar la espalda baja en deportes que exigen levantar peso, como el levantamiento de pesas.
4. Ortopedia Geriátrica
La ortopedia geriátrica está dirigida a personas mayores que enfrentan problemas de movilidad y que buscan mejorar su calidad de vida. Con la edad, muchas personas desarrollan problemas en las articulaciones, huesos y músculos, y la ortopedia geriátrica les ayuda a mantenerse activos y cómodos. Algunos ejemplos incluyen:
- Bastones y andadores: Para brindar soporte y equilibrio a personas con movilidad reducida.
- Sillas de ruedas: Esenciales para quienes tienen una movilidad muy limitada.
- Sillas y camas ortopédicas: Diseñadas para facilitar el descanso y evitar lesiones en personas con dificultad para moverse.
5. Ortopedia Correctiva
La ortopedia correctiva se usa para tratar y corregir deformidades óseas y articulares, que pueden afectar a personas de todas las edades. Estos dispositivos son recomendados por especialistas y diseñados para mejorar la postura y la alineación de ciertas partes del cuerpo. Algunos elementos de la ortopedia correctiva son:
- Corsés para la columna vertebral: Indicados en personas con problemas de curvatura como escoliosis o cifosis.
- Calzado ortopédico: Ayuda a corregir problemas de pisada y distribuye el peso corporal para evitar deformidades.
- Férulas para la corrección de dedos y manos: Utilizadas en casos de artritis o tras una cirugía en las extremidades superiores.
6. Ortopedia Protésica
La ortopedia protésica es una de las más conocidas y se centra en la creación de prótesis para reemplazar miembros amputados. Las prótesis modernas permiten una gran movilidad y son personalizadas para cada paciente, ofreciendo un alto nivel de comodidad y funcionalidad. Las prótesis pueden ser de:
- Miembros superiores: Para personas que han perdido una mano o un brazo, permitiendo funciones básicas de agarre y movimiento.
- Miembros inferiores: Para quienes han perdido una pierna, ayudándoles a caminar y realizar actividades diarias.
- Prótesis mioeléctricas: Estas prótesis avanzadas funcionan con sensores musculares y permiten un mayor control del movimiento.
7. Ortopedia Rehabilitadora
Este tipo de ortopedia está dedicada a aquellos que han sufrido accidentes o cirugías, ayudándoles a recuperar movilidad y fuerza. Los elementos de ortopedia rehabilitadora son diseñados para brindar apoyo durante la fase de recuperación y suelen incluir:
- Férulas y soportes de inmovilización: Utilizados tras fracturas o intervenciones quirúrgicas para permitir una recuperación segura.
- Dispositivos de tracción: Para corregir deformidades y aliviar el dolor en ciertas zonas del cuerpo.
- Sillas de ruedas de recuperación: Especialmente diseñadas para personas que están en proceso de rehabilitación y necesitan movilidad temporal.